Lo mejor para que un bebe coma variado y diferentes sabores es
introducirlo a los dulces lo más tarde posible. Al año de edad o
más tarde aún es lo que se recomienda. Cuanto más tarde los niños
comiencen a disfrutar los dulces, más probable es que disfruten
otros sabores como novedades de
alimento para bebés.
Incorporar el consumo de 5 de frutas y verduras al día, de
preferencia de diferentes colores, propuesto por la Organización
Mundial de la Salud es una forma de asegurar un aporte variado de
vitaminas y minerales.
Si rechaza la verdura lo adecuado es que de postre le des fruta,
ya que ésta contiene vitaminas, minerales y fibra en cantidades
muy semejantes a las verduras y puede reemplazarlasremplazarlas
perfectamente. Si el problema de tu pequeño es que todavía es
pequeño y no mastica bien, ármate de paciencia con él y procura
no hacer un drama de cada comida. Y, hasta que domine mejor la
masticación, ofrécele postres como flanes, pasteles de frutas,
arroz con leche…
Las frutas son un dulce sano pero lo mejor es ofrecerlas como
postre una vez que el bebe ya haya comido otra cosa como
vegetales (que lo ideal es introducirlos tempranamente). De a
poco podemos comenzar a endulzar algo más sus comidas o bebidas y
lo ideal es comenzar con jugos de frutas más que con azúcar.
La otra función del postre es evitar que el niño se quede con
hambre. Y es que si no se siente satisfecho, al poco de comer se
pondrá a “picar”, algo que acabará desequilibrando su dieta.